El análisis geotécnico es una disciplina que se enfoca en el estudio de las propiedades físicas y mecánicas de los suelos y rocas en relación con las obras de ingeniería civil y la geología aplicada.
Su objetivo principal es comprender el comportamiento de los materiales geotécnicos y su interacción con las estructuras y el entorno circundante.
El análisis geotécnico implica la recopilación de datos sobre el suelo y las rocas mediante la realización de investigaciones de campo y ensayos de laboratorio.
Estos datos se utilizan para evaluar la capacidad portante del suelo, su estabilidad y su respuesta ante las cargas aplicadas.
Algunos de los parámetros geotécnicos clave que se determinan en el análisis geotécnico incluyen la resistencia al corte, la compresibilidad, la permeabilidad y la consolidación del suelo.
Este tipo de análisis se utiliza en una amplia gama de proyectos de ingeniería, como cimentaciones de edificios, diseño de presas, túneles, carreteras, puentes y otras estructuras.
El análisis geotécnico proporciona información crucial para garantizar la seguridad y la estabilidad de las obras, así como para optimizar su diseño y construcción.
En resumen, el análisis geotécnico es un proceso integral que permite comprender y caracterizar las propiedades de los suelos y rocas, y su aplicación es fundamental en la ingeniería civil para tomar decisiones informadas y seguras durante la planificación y ejecución de proyectos de construcción.